Los despidos masivos continuaron el miércoles en la industria tecnológica y se extendieron a los sectores financiero y de la vivienda, a medida que se intensificaba el asalto corporativo a los puestos de trabajo y los salarios en la recesión instigada por la Reserva Federal.

En un movimiento ampliamente esperado, la empresa matriz de Facebook, Meta Platforms, Inc., eliminó 11.000 puestos de trabajo en la madrugada del miércoles. En una carta a los empleados, el director general de Meta y fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, escribió que 'había decidido reducir el tamaño de nuestro equipo en un 13%' y que lo sentía 'especialmente por los afectados'.

Zuckerberg dijo que el aumento de la publicidad en las redes sociales que se produjo durante la crisis del COVID-19 no se convirtió en una 'aceleración permanente que continuara incluso después de la pandemia' como predijeron 'muchas personas'. En cambio, escribió, la 'desaceleración macroeconómica' y el aumento de la competencia de otras plataformas de medios sociales como TikTok 'han hecho que nuestros ingresos sean mucho más bajos de lo que esperaba. Me equivoqué y asumo la responsabilidad por ello'.

A pesar del mea culpa del milmillonario —su patrimonio personal aumentó en 1.780 millones de dólares hasta los $37.200 millones tras el anuncio—, Zuckerberg subrayó que Meta necesitaba ser 'más eficiente en cuanto al capital' y que estaba 'reestructurando equipos para aumentar nuestra eficiencia'.

Aunque afirmó que los despidos se consideraban un 'último recurso', está claro que Wall Street, que perdió el 70 por ciento de su inversión en acciones de Meta desde principios de 2022, exigía a Zuckerberg que tomara medidas drásticas para recortar costes, incluida la eliminación del 20 por ciento de la plantilla de 87.000 empleados.

El impacto de los despidos de Meta será devastador, ya que los trabajadores del sector tecnológico se apresuran a encontrar nuevos empleos en el entorno general de despidos masivos en toda la industria. Sandra J. Sucher, profesora de gestión en Harvard, declaró al New York Times: 'Estos ciclos de auge y caída son increíblemente destructivos dentro de las organizaciones porque las personas empleadas en ellas sienten que no saben a qué atenerse'.

Los antiguos empleados acudieron a las redes sociales para expresar su disgusto por los despidos y la forma en que la empresa de $270.000 millones los llevó a cabo. Carlos Giffoni, que trabajaba como gerente de producto para Instagram, publicó en LinkedIn: 'Acabo de despertarme para descubrir que he sido despedido por Meta/Instagram a través de un correo electrónico'.

Giffoni continuó: 'No hay advertencia, y se me dijo recientemente por un líder que el equipo en el que trabajé era de alta prioridad y no se vería afectado. Despidos en toda la empresa por correo electrónico. Qué elegante. Supongo que ahora tengo mucho tiempo para escribir'.

A los despedidos se les negó inmediatamente el acceso a los sistemas e instalaciones de Meta. Eric Triebe, gerente de ingeniería de software, publicó en LinkedIn que 'se siente como si estuviera en un episodio de Severance [serie de televisión]' debido al abrupto despido.

'No hay reunión con RRHH. No hay despedida de los compañeros de trabajo. Al parecer, no hubo contacto ni discusión de la dirección con mi jefe de salto en términos de justificación. Sólo un correo electrónico frío e impersonal y luego el enchufe antes de que te despiertes', dijo Triebe.

Otros despidos en el sector tecnológico confirmados el miércoles fueron los de 1.000 puestos de trabajo en Salesforce, uno de los mayores empleadores de San Francisco, y los de Microsoft, que recortó un 1%, o unos 1.000 puestos de trabajo, en octubre.

Comentando los despidos de Salesforce, TechCrunch escribió a última hora del martes: 'Aunque no fue de la escala de los despidos masivos de Twitter la semana pasada [3.700 recortes de empleo], todavía fue otro anuncio en el continuo ritmo de tambor de los despidos de tecnología que hemos estado escuchando de las empresas grandes y pequeñas en los últimos meses, ya que las empresas tienen como objetivo la rentabilidad después de un largo período de crecimiento uber alles.'

Mientras tanto, los despidos afectaron a la industria financiera el miércoles, con los bancos de inversión Citigroup y Barclays eliminando personal de asesoramiento y negociación. Un informe de la CNBC dijo que Citigroup 'despidió esta semana a unos 50 empleados de comercio', basándose en información de fuentes anónimas. Bloomberg también informó el martes de que Citigroup recortó 'docenas de puestos de trabajo' en su unidad de banca de inversión.

La CNBC también informó de que Barclays, con sede en Londres, recortó 200 puestos de trabajo en sus 'mesas de banca y negociación esta semana', y que Credit Suisse está 'recortando 2.700 empleados en el cuarto trimestre y pretende recortar un total de 9.000 puestos para 2025'.

El sector de la vivienda y su brazo hipotecario están siendo puestos patas arriba por las subidas de tipos de interés de la Reserva Federal. Ya se han producido despidos en New American Funding (240 despidos) de Tustin, California, y Athas Capital Group (200 puestos de trabajo) de Calabasas Hills, California, está cerrando sus puertas. Según la Oficina de Estadísticas Laborales de EE.UU., los bancos hipotecarios independientes recortaron 8.200 puestos de trabajo en el mes de septiembre.

Con los tipos de interés de las hipotecas en su punto más alto de los últimos 21 años, la actividad crediticia ha caído en picado en Estados Unidos. El miércoles, la agencia inmobiliaria residencial Redfin, con sede en Seattle, despidió al 13%, es decir, a 862 empleados, de su plantilla.

En una carta a los empleados publicada a las 5:45 a.m. hora del Pacífico, el CEO de Redfin, Glenn Kelman, dijo: 'Empezaremos a llamar a la gente a la que se le pide que deje otros departamentos a las 8:00 a.m. hora local, y luego enviaremos un correo electrónico a todos los demás cuando hayamos terminado'. Kelman dijo que la expectativa es que el mercado de la vivienda en 2023 será 'un 30% menor que en 2021'.

Ian Shepherdson, economista jefe de Patheon Macro, dijo a Forbes el lunes: 'Es una certeza que los despidos pronto aumentarán en todo el ecosistema de la vivienda'. También advirtió que las luchas en el sector de la vivienda serán similares a los bien publicitados despidos en el sector tecnológico.

Shepherdson continuó: 'Los despidos todavía no están aumentando —y el listón para dejar marchar a la gente probablemente sea más alto que en ciclos anteriores, dado lo mucho que les costó a las empresas volver a contratar a la gente tras el shock inicial de Covid—, pero es probable que eso cambie en los próximos dos meses.

(Publicado originalmente en inglés el 10 de noviembre de 2022)