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Las grandes protestas por el accidente de tren en Tempi profundizan la crisis política en Grecia.

Una sección de la manifestación masiva organizada por la asociación de las familias de las víctimas de la colisión ferroviaria de Tempi, que mató a 57 personas hace casi dos años, en la céntrica plaza Syntagma, en Atenas, Grecia, el 26 de enero de 2025 [AP Photo/Yorgos Karahalis]

El movimiento masivo de jóvenes y trabajadores que estalló dos años después del accidente ferroviario de Tempi está sacudiendo a la clase dominante en Grecia. Enfrentado a las protestas más grandes en la historia del país, el gobierno pende de un hilo. Mientras los sindicatos intentan mantener el movimiento bajo control, los partidos de la oposición reaccionan con diversas maniobras en el Parlamento.

El 7 de marzo, el gobierno del derechista Nea Dimokratia (ND) sobrevivió a una moción de censura por una estrecha mayoría. De los 300 diputados, 157 votaron a favor del gobierno y 136 en contra. Siete estuvieron ausentes, entre ellos los del partido de extrema derecha espartiatas y el ex primer ministro de ND, Antonis Samaras.

Tras la huelga general y las mayores protestas de la historia de Grecia a finales de febrero, decenas de miles de manifestantes han vuelto a protestar en las últimas semanas, exigiendo 'verdad y justicia' para las 57 víctimas del desastre ferroviario de 2023. Los trabajadores ferroviarios realizaron manifestaciones; en Atenas, la policía utilizó gases lacrimógenos y porras contra los jóvenes que protestaban en la plaza Syntagma.

El miércoles, se celebró un evento en la Universidad Pantion de Atenas en el que también habló Maria Karystianou, madre de una víctima de Tempi y miembro de la Asociación de Familiares de Tempi que inició el movimiento de protesta.

El jueves por la mañana, los estudiantes protestaron en Atenas y Tesalónica. Esa noche, miles de personas se reunieron con carteles y pancartas en un concierto al aire libre en la plaza Syntagma en memoria de Tempi. Los estudiantes habían convocado el evento con las siguientes palabras: 'Una canción para las personas que perdieron la vida en los trenes. ... ¡Seguiremos hasta el final! ¡O sus ganancias o nuestras vidas!'

Una encuesta reciente del instituto griego de investigación de opinión MRB también muestra una insatisfacción generalizada entre la población. La mayoría de los encuestados (72.2 por ciento) consideró el choque de trenes como un crimen, no como un accidente; El 78,5 por ciento dudaba de que el gobierno estuviera comprometido a resolver el accidente de Tempi, y el 57,5 por ciento estaba a favor de nuevas elecciones anticipadas. Hubo un 70,3 por ciento que incluso apoyó la afirmación de que todos los trenes deberían suspenderse durante los años que sean necesarios para restaurar la seguridad necesaria en el ferrocarril.

El gobierno de ND respondió a la presión restructurando el gabinete. Los nuevos ministros fueron anunciados el viernes y juraron su cargo el sábado. Según el diario Kathimerini, los círculos gubernamentales están hablando de un 'nuevo comienzo significativo' porque algunos políticos más jóvenes están obteniendo puestos importantes. Pero en realidad, es un intento desesperado del gobierno de crear un gabinete más estable con algunos cambios cosméticos para sofocar la resistencia de la clase trabajadora. El hecho de que los puestos clave de los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa permanezcan sin cambios también demuestra la continuidad del apoyo militar a la guerra en Ucrania y al genocidio israelí en Gaza.

En algunos nombramientos, la reorganización del gabinete señala un nuevo giro a la derecha. El ex ministro de Economía y Finanzas Kostis Hatzidakis, que ha impuesto los intereses de lucro de las empresas y los bancos sobre los trabajadores griegos, ha sido ascendido a viceprimer ministro. El ministro de Transportes, Christos Staikouras, dimite y será sustituido por Christos Dimas (ex viceministro de Finanzas); Su nuevo adjunto, Konstantinos Kyranakis, sería el responsable de la reforma de la red ferroviaria. Dimas y Kyranakis son jóvenes arribistas de ND.

Como nuevo ministro de Migración, Makis Voridis, un conocido ultraderechista de línea dura, liderará las políticas del gobierno contra los refugiados. El ultraderechista ministro de Sanidad, Adonis Georgiadis, que ha recortado drásticamente el presupuesto sanitario durante su mandato, conserva su cargo. La derechista ministra de Trabajo, Niki Kerameos, que como exministra de Educación desencadenó grandes protestas de docentes y estudiantes contra la mortal política de confinamiento del gobierno durante la primera fase de la pandemia, también sigue en el cargo.

Otro cambio en la cúpula política tuvo lugar el jueves. Konstantinos Tasoulas prestó juramento como nuevo presidente, un cargo que tiene principalmente una función representativa en Grecia. Al mismo tiempo que prestó juramento, los familiares de las víctimas de Tempi presentaron una demanda contra Tasoulas. Lo acusaron de haber participado activamente en el encubrimiento del desastre de Tempi en su anterior papel como presidente del Parlamento, por ejemplo, al no presentar demandas contra políticos individuales y guardar silencio sobre ellas.

La moción de censura de la semana pasada fue presentada por el mayor partido de la oposición, el PASOK, en colaboración con Syriza, los grupos escindidos de Syriza Nea Aristera y Plefsi Eleftherias, y nueve diputados independientes. Durante los tres días de debate parlamentario, estos partidos se presentaron como la voz del movimiento de protesta y de la oposición de 'izquierda' al derechista ND.

El líder del PASOK, Nikos Androulakis, acusó al primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, de responsabilidad penal por el choque de trenes. El jefe de la pseudoizquierdista Syriza, Sokratis Famellos, denunció el encubrimiento y declaró: 'El verdadero dilema es si debemos permitir que el señor Mitsotakis lleve a Grecia al caos'.

Con esta declaración, Famellos dejó claro cuál es la verdadera preocupación de Syriza. No se trata de la investigación del crimen de Tempi, del que Syriza es en parte responsable debido a la privatización del operador ferroviario durante su mandato. Más bien, no quiere que Mitsotakis 'conduzca al país al caos', con lo que Famellos se refiere al peligro de un desarrollo revolucionario en la clase obrera que podría sacudir no solo al gobierno sino a toda la clase dominante. El papel del PASOK, Syriza y sus diversas ramificaciones es salvar el orden capitalista y evitar que el movimiento de masas se extienda.

Otra de las preocupaciones de Famellos es que Grecia necesita calma interna para desempeñar un papel más influyente en la política exterior en vista de la actual situación mundial. En una reunión del Secretariado Político de Syriza durante el fin de semana, el líder del partido declaró:

La inestabilidad geopolítica está intensificando la demanda por un cambio de gobierno. Nuestro país está ausente de importantes decisiones y acontecimientos internacionales. Una política de seguridad fuerte requiere una política exterior fuerte y una sociedad fuerte. El gobierno no está atendiendo ninguna de estas necesidades.

Una comisión parlamentaria especial de 27 diputados (14 de ND, tres del PASOK, dos de Syriza, uno de cada uno de los otros partidos) también ha sido convocada esta semana para supuestamente investigar las acusaciones de encubrimiento del accidente de tren por parte del exministro Christos Triantopoulos en la Oficina del Primer Ministro.

Nadie debería tener fe en una comisión de investigación que incluye a las mismas partes que fueron cómplices del crimen y que deben sentarse en el banquillo de los acusados. Esta maniobra está diseñada para retrasar la investigación real sobre el accidente de Tempi y continuar con el encubrimiento. Se trata de una farsa con un claro objetivo político: controlar la ira de las calles y llevar al movimiento a un callejón sin salida.

Las críticas a ND por parte de los partidos de oposición de 'izquierda' y su fingida simpatía por las víctimas de Tempi son una fachada. Sus palabras vacías no pueden ocultar el hecho de que las mismas partes crearon las mismas condiciones que llevaron al choque de trenes.

El socialdemócrata PASOK, que ya se estaba hundiendo políticamente y solo logró recuperar algunos votos gracias a las políticas de derecha de Syriza y ND, implementó las primeras rondas de medidas de austeridad a partir de 2009. En las elecciones de mayo de 2012, el PASOK fue históricamente castigado: cayó al 13 por ciento, desde casi el 44 por ciento en 2009. Sin embargo, volvió a ser incluido en el gobierno y, junto con ND, implementó los dictados de austeridad de la 'Troika' de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional.

Después de que el PASOK y ND se habían vuelto tan odiados que apenas podían controlar la resistencia popular, fue el turno de Syriza. Aprovechando la ola de protestas de enero de 2015, obtuvo una histórica victoria electoral y convocó un referéndum sobre si implementar otro programa de austeridad exigido por sus acreedores. El claro 'Ochi' (no) fue inmediatamente pisoteado por Syriza. En los años siguientes, implementó una rigurosa agenda de austeridad y privatizó el operador ferroviario estatal Trainose en 2017. Habiendo sido también completamente desacreditada, perdió las elecciones de 2019 por goleada y desde entonces ha estado languideciendo en las encuestas en torno al 6 por ciento.

El partido de Zoi Konstantopoulou, Plefsi Eleftherias (Curso de la Libertad), sigue actualmente por delante de Syriza en las encuestas. Está tratando de capitalizar las protestas de Tempi presentándose como una defensora de los familiares y manifestantes. Konstantopoulou, de profesión abogada, fue un destacado miembro de Syriza durante muchos años y es hija del ex líder del predecesor de Syriza, Synaspismos.

En enero de 2015, Konstantopoulou fue elegida diputada por Syriza, y en febrero del mismo año fue elegida presidenta del Parlamento. Después del referéndum del verano, se unió a los diputados disidentes de Syriza en el nuevo partido Unidad Popular (Laiki Enotita). Un año más tarde, fundó su propio partido, Plefsi Eleftherias, que defiende posiciones nacionalistas.

Todos estos partidos no ofrecen ninguna perspectiva para la clase trabajadora, pero son un obstáculo para su lucha por la justicia y mejores condiciones de vida. Al mismo tiempo que afirman estar del lado de los manifestantes, defienden el sistema capitalista, que es la causa del desastre de Tempi y del declive social.

Como enfatizó el WSWS en un comentario reciente, los trabajadores y la juventud deben alejarse de estas organizaciones en bancarrota y de sus sindicatos afiliados y pasar a una perspectiva y estrategia socialista internacional. Esto requiere la formación de comités de acción de base como parte de la Alianza Internacional Obrera de Comités de Base(AIO-CB) y el establecimiento de una sección griega del Comité Internacional de la Cuarta Internacional (CICI).

(Artículo publicado originalmente en inglés el 16 de marzo de 2025)