El gobierno laborista de Starmer está utilizando el desempleo y los recortes a las ayudas sociales para empujar a la juventud a las fuerzas armadas como carne de cañón.
El editor político del periódico The Times, Steven Swinford, escribió que “Labour está instando a los jóvenes desempleados que reciben ayudas sociales a ingresar en las fuerzas armadas para obtener ‘buenos empleos con buenos sueldos’, en medio de una crisis de reclutamiento militar”.
Cita a la ministra de Hacienda, Rachel Reeves, hablando en ITV: “En el mundo cambiante al que nos enfrentamos hoy, hay oportunidades para conseguir buenos trabajos en nuestras fuerzas armadas… Y, por supuesto, a medida que este gobierno aumente el presupuesto de defensa, habrá aún más buenos empleos con salarios decentes en ese sector”.
Liz Kendall, secretaria de trabajo y pensiones de Labour, dijo al Parlamento sobre el plan para fomentar que los desempleados se unan a las fuerzas armadas: “Antes de ser nombrada a este cargo, como diputada en la oposición, hablé precisamente de estos temas con mi centro de empleo local y el equipo de reclutamiento de las fuerzas armadas… Sin duda seguiré teniendo más conversaciones con colegas del Ministerio de Defensa para asegurarnos de llevar este plan a cabo”.
Los Jóvenes y Estudiantes Internacionales por la Igualdad Social (JEIIS, o International Youth and Students for Social Equality, IYSSE en inglés) denuncia estos planes sedientos de sangre.
El laborismo convierte la pobreza en un arma
Hablar de “oportunidades” para unirse al ejército es un engaño. Los jóvenes serán prácticamente forzados a alistarse. Labour ha recortado miles de millones de libras de las ayudas sociales, arrojando a 400.000 personas más a la pobreza de forma inmediata, con más recortes por venir. Ha atacado directamente a la juventud, excluyendo por completo a los menores de 22 años del subsidio por incapacidad.
La clase dominante siempre ha dependido de la privación social para alimentar el reclutamiento militar. Un informe de 2019 de la Red Internacional por los Derechos de la Infancia descubrió que, entre 2013 y 2018 en Inglaterra, el reclutamiento de jóvenes de 16 a 17 años fue “un 57 por ciento más alto en el quintil más pobre de las circunscripciones que en el más rico”. Aproximadamente el 40 por ciento de los entrevistados entre 1998 y 2000 dijeron que se enlistaban como último recurso.
Mientras más pobre es su origen, más probable es que los reclutas terminen en la infantería de primera línea, donde las bajas son más altas.
Las campañas de reclutamiento del ejército apuntan específicamente a los sectores más empobrecidos de la clase trabajadora. Un informe para la campaña de reclutamiento de 2017 identificó al público objetivo como jóvenes de familias con un ingreso promedio de 10.000 libras anuales. Ciudades con alto desempleo, a menudo con una historia de brutal desindustrialización, son prioritarias.
Labour ha casi duplicado el presupuesto para campañas de reclutamiento del ejército este año, asignando 17,2 millones de libras. Está gastando 1.300 millones de libras en un nuevo Servicio de Reclutamiento de las Fuerzas Armadas, gestionado por el conglomerado privado Serco, que será lanzado en 2027.
La agenda militarista del gobierno es inseparable de sus ataques al gasto social, redirigiendo recursos hacia las fuerzas armadas. El mismo día que Reeves anunció profundos recortes a las ayudas sociales, destinó 2.200 millones de libras más al ejército—parte de los planes para elevar el gasto en defensa al 2,7 por ciento del PIB para 2027, y mucho más allá.
Utilizar un presupuesto de defensa elevado para reclutar a los jóvenes arrojados a la crisis por la pérdida de apoyo social completa el círculo. ¿Cuánto tiempo pasará antes de que rechazar un puesto en el ejército se convierta en motivo para suspender las ayudas por desempleo?
Cómo resolver el problema de la carne de cañón
El gobierno de Labour está encabezando al imperialismo británico hacia una nueva lucha por la redistribución del mundo y sus fuentes de ganancia. Starmer lidera los esfuerzos para formar una “coalición de los dispuestos” contra Rusia, involucrando “botas sobre el terreno y aviones en el aire” de la OTAN en Ucrania, donde cientos de miles de ucranianos y rusos ya han perdido la vida en tres años de conflicto devastador.
Durante estos años, los jefes militares británicos han hablado abiertamente sobre la necesidad de preparar al ejército “para participar en una guerra en su forma más violenta”. Un artículo reciente de The Times reportó: “Los jefes de defensa británicos están considerando reforzar las fuerzas de reserva para preparar al ejército para una ‘guerra más grande y prolongada’. Quieren aumentar la capacidad de respuesta del ejército para que pueda ‘generar masa rápidamente y sostenerla’, dijo una fuente gubernamental de alto nivel”.
Pero han tenido enormes dificultades para conseguir los reclutas necesarios. Los objetivos de reclutamiento no se han cumplido ningún año desde 2010. En el año hasta junio de 2024, más de 15.000 efectivos de tiempo completo abandonaron las fuerzas armadas, mientras que poco más de 11.000 se enlistaron.
El sentimiento antibélico y la oposición al imperialismo británico están creciendo entre la juventud. Una encuesta de YouGov-Public First publicada en febrero y encargada por The Times encontró que sólo el 11 por ciento de los jóvenes dijeron que irían a la guerra por su país, y el 41 por ciento dijo que no existía ninguna circunstancia en la que tomarían las armas por el Reino Unido. Menos de la mitad se describió como orgullosa de ser británica.
La clase dominante debe recurrir entonces a la coerción. Las elecciones generales del año pasado fueron utilizadas como una oportunidad para presentar propuestas de conscripción. Los tories prometieron un servicio nacional obligatorio para jóvenes de 18 años. Estos planes enfrentaron obstáculos, incluyendo la preocupación de altos mandos militares sobre si tenían la estructura para implementarlos. La política de Labour es poner en marcha este proceso mediante una afluencia forzada de jóvenes de clase trabajadora.
¡Luchar por el futuro, no por el capitalismo británico!
El capitalismo muestra su verdadero rostro ensangrentado. Los jóvenes de todo el mundo están viendo cómo su futuro se consume en las llamas de la guerra, la crisis económica y climática. Sus comunidades están destrozadas y el trabajo disponible es mal remunerado, sin salida y alienante.
Labour espera usar esta miseria para alimentar sus planes de una explosión de militarismo británico, en competencia con todas las demás potencias imperialistas. Como escribió recientemente el Partido Socialista por la Igualdad (Reino Unido) en una declaración:
La presidencia de Donald Trump marca un punto de inflexión en la política mundial. Sus esfuerzos por derrocar la constitución y establecer una dictadura en el principal país imperialista del mundo han trastocado todas las viejas relaciones entre las potencias imperialistas establecidas tras la Segunda Guerra Mundial…
Los gobiernos europeos han respondido a esta política económica y militar de “Estados Unidos primero” con una erupción de militarismo y nacionalismo. La afirmación descarada de dominación colonial por parte de Trump—from Gaza to Yemen and Ukraine—está empujando a todos los líderes imperialistas a preparar su propia campaña de agresión militar y neocolonial…
El gobierno de Starmer contará con la ayuda de la burocracia sindical en estos esfuerzos. Unite y el sindicato GMB apoyan completamente los planes del gobierno para aumentar el gasto en el ejército, y son hostiles a las protestas contra el imperialismo británico. El sindicato ferroviario, marítimo y de transporte (RMT), presentado como un sindicato de izquierda, ha resuelto silenciosamente conflictos entre sus miembros en la Royal Fleet Auxiliary. El Sindicato Nacional de Educación (NEU) y el Sindicato de Universidades y Colegios (UCU) guardan silencio sobre los esfuerzos de reclutamiento entre estudiantes de escuelas, institutos y universidades.
Resistir la ofensiva combinada de guerra y austeridad de Labour y luchar por nuestro futuro requiere construir un nuevo movimiento socialista contra la guerra, basado en nuevas organizaciones de la clase trabajadora: comités de base de lucha de clases independientes del podrido aparato sindical. El marxismo, la política que puso fin a la Primera Guerra Mundial mediante la Revolución Rusa de 1917 y la Revolución Alemana de 1918-1919, debe ser retomado por los trabajadores y la juventud.
Esta es la tradición que representa los JEISS. Escriba sus opiniones sobre los planes de Labour. Pónte en contacto hoy mismo para unirte a los JEIIS.
(Artículo originalmente publicado en inglés el 4 de abril de 2025)
Leer más
- Starmer visits British-NATO troops in Estonia, pushes war agenda
- UK Prime Minister Starmer declares for war on Iran
- UK Labour leader Keir Starmer boasts of readiness to kill millions of people in nuclear war
- Labour slashes public spending, hands over billions to military in UK Spring Statement
- No to Starmer’s war and austerity government—fight for socialism!