Español

Los trabajadores denuncian que elección de sindicato patrocinado por EE.UU. en GM Silao fue fraudulenta

Los trabajadores del complejo Silao de General Motors, en el centro de México, han denunciado la elección del mal nombrado Sindicato Independiente Nacional de Trabajadores y Trabajadoras de la Industria Automotriz (SINTTIA), afirmándole al World Socialist Web Site que fue utilizada para darse una cubierta “democrática” y facilitar la imposición de un nuevo contrato propatronal.

Embajador estadounidense Ken Salazar con los dirigentes del SINTTIA en la Embajada estadounidense, 28 de junio de 2022 [Photo: @USAmbMex]

Por dos años, desde que se convirtió en el primer sindicato en utilizar la nueva Reforma Labora para reemplazar a la gansteril Confederación de Trabajadores de México (CTM), el SINTTIA ha mantenido al mismo Comité Ejecutivo no elegido que se ha dedicado a imponer las órdenes de la empresa al igual que lo hizo la CTM por 25 años.

Los trabajadores en la planta pronto se dieron cuenta que nada había cambiado. “El sindicato está a favor de la empresa, por el trabajador no hace nada,” comentó un trabajador de ensamble al WSWS poco antes de la elección.

Además, las revelaciones del WSWS de que la dirección del sindicato fue escogida a dedo y entrenada por el Solidarity Center —el brazo internacional de la confederación sindical AFL-CIO y que financia el Gobierno estadounidense— se ha hecho de conocimiento público entre los trabajadores.

El Solidarity Center [Centro de Solidaridad] intervino con dinero en efectivo y abogados para destruir un grupo formado por trabajadores de base contra la CTM llamado “Generando Movimiento”, capacitando a varios de estos trabajadores como sindicalistas propatronales y utilizándolos para registrar el SINTTIA. Algunos de los exlíderes de Generando Movimiento que fueron marginados por SINTTIA habían sido despedidos por negarse a trabajar extra en apoyo a la huelga nacional estadounidense de 2019 en GM.

En respuesta al aumento de la oposición, el aparato sindical decidió burocráticamente que era hora de hacer cumplir sus propios estatutos convocando su segunda asamblea pública el 17 de diciembre y celebrando la elección de dirigentes el 1 y 2 de febrero.

Uno de los cuatro trabajadores activos elegidos para la Comisión Electoral en esta asamblea se comunicó con el World Socialist Web Site para exponer todo como una trama para limitar la elección a facciones dentro del Comité Ejecutivo existente y, luego, para asegurar la reelección de la planilla liderada por la actual secretaria general, Alejandra Morales Reynoso.

El trabajador, quien pidió permanecer en el anonimato, dijo que el proceso fue “dirigido”, en última instancia, por Héctor de la Cueva y su Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS), la misma firma de abogados que estableció el SINTTIA trabajando con el Solidarity Center.

SINTTIA organiza una pantomima “democrática”

“Para empezar, la Comisión Electoral fue elegida en asamblea sin quórum, con 300 gentes”, dijo el trabajador, señalando una regla sindical de que al menos un tercio de los miembros debe estar presente para que las decisiones sean válidas.

Las asambleas hasta el momento fueron “son planeadas para que haya poca gente”, explicó. “No ponen transporte. Eligen un local que no alberga ni a mil personas. Lo hacen en un momento en que el turno de noche, un tercio de la plantilla, no va porque se va a casa a descansar. Es poca gente, son principalmente simpatizantes. Cuando hay críticas, te abuchean”.

Además de la elección de cuatro trabajadores activos para la Comisión Electoral, encargada de organizar la votación de febrero, la “pseudoasamblea votó un pliego petitorio” para el próximo contrato que había sido elaborado de antemano por la dirigencia, dijo el trabajador. “Se propone un aumento de un mísero 15 por ciento, que nunca se va a dar. Va a ser la mitad o menos. Y son pocas las modificaciones del contrato existente”.

Las únicas nuevas demandas en el documento consisten en un par de días festivos adicionales, un bono de 500 pesos (US$30) para útiles escolares, bonificaciones especiales para trabajadores con mucha antigüedad y líderes de equipo, y un aumento del 55 por ciento al 65 por ciento del sueldo durante los paros técnicos (cuando SINTTIA había prometido que lucharía por el 75 por ciento).

Incluso con un aumento salarial del 15 por ciento, el pago se dividiría en 13 niveles de 318 a 932 pesos (US$19-55) por día en GM Silao, donde los trabajadores ensamblaron alrededor de 840 camionetas por día el año pasado, que se venden en alrededor de $50.000, así como motores y transmisiones.

General Motors, que registró ganancias de $10 mil millones el año pasado, paga a toda la fuerza laboral de Silao el equivalente a cuatro o cinco camionetas por día en salarios.

En la asamblea del 17 de diciembre, se anunció una fecha límite del 7 de enero para inscribir las planillas completas para competir en las elecciones, en medio de las fiestas navideñas. Solo fueron aceptadas tres planillas, todas dirigidas por secretarios existentes del sindicato.

“Así nunca vamos a encaminar a la verdadera democracia sindical”, dijo el trabajador, indicando que todas las planillas son “asesoradas por CILAS”.

Añadió: “La planilla de Alejandra estuvo incompleta ya qué no integró candidatos para la Comisión de Honor y Justicia. No todos los afiliados tuvieron derecho a participar para inscribir planilla, solo los de una lista qué sugirió Alejandra de 1800”. Es más, “también modificó los estatutos para poder reelegirse”.

Una grabación de audio de una reunión de la Comisión Electoral muestra que sus miembros consideraron que los mantuvieron ignorantes de las reglas, incluidas aquellas contra la reelección de funcionarios. “Si hubiéramos sabido”, dijo uno, “las tres [planillas] no hubieran competido”, y los otros parecían estar de acuerdo. El miembro que habló con el WSWS dijo que dos de ellos tenían un sesgo evidente pro-Morales.

Muchos trabajadores de GM Silao acudieron a las redes sociales para protestar que no se les permitió votar a pesar de pagar cuotas o que ni siquiera sabían de las elecciones. Algunos critican la participación en la elección de las fábricas de autopartes de Draxton y Fränkische, ya que se unieron al SINTTIA hace menos de un año, y que Morales es más conocida entre esos trabajadores.

El 3 de febrero, el sindicato anunció los resultados. Solo 3.700 trabajadores de las tres empresas votaron, con 1.662 para la planilla Rosa-Negra liderada por Morales, seguido de 1.611 votos para la planilla Azul del secretario de Trabajo y Conflictos, Antonio Castro, y 370 votos para la planilla Roja.

Esto es mucho menos de la mitad de los aproximadamente 9.000 trabajadores de las tres empresas y mucho menos de los 5.875 trabajadores que participaron en la votación que expulsó a la CTM de GM Silao en agosto de 2021.

El miembro de la Comisión Electoral explicó: “Hubo irregularidades en el padrón de votantes ya que no era el más actual en el Centro Federal [de Conciliación y Registro Laboral]. Además se inflaron las cantidades de Draxton y Fraenkische. No hay constancia de visores del Centro Federal en esas empresas los días de la votación”.

Las grabaciones de audio compartidas con el WSWS demuestran que Héctor de la Cueva del CILAS ordenó a la Comisión Electoral que imprimiera solo 7.000 boletas y aceptara cualquier padrón de votantes proporcionado por Morales. En otra grabación, se puede escuchar a Morales ordenando a la comisión que anuncie: “Está el listado y que nada más son los que tienen derecho a voto, porque está legal en el centro y aunque los demás cumplan con sus facultades de ser sindicalizados no se les va a permitir votar por decisión de la Comisión Electoral”.

La planilla azul ha impugnado los resultados ante el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral y el Gobierno de los Estados Unidos, al tiempo que insiste en que GM no puede obligar a sus funcionarios a abandonar sus cómodos puestos de oficina y beneficios hasta que haya una respuesta oficial.

Lo más llamativo de las tres planillas es que ninguna propuso cambios al pliego petitorio para el contrato colectivo de 2024-26, que fue elaborado desde arriba en diciembre. El pliego de hecho apoya mantener la semana laboral de cuatro días por 12 horas y dice explícitamente que la empresa tiene la libertad de modificar las semanas laborales, imponer “jornadas discontinuas y turnos especiales”, trasladar a los trabajadores de áreas y llevar a cabo despidos a su antojo.

En otras palabras, los intereses de los trabajadores no figuraron en la elección, que se limitó a decidir cuál facción de la burocracia puede seguir evitando el trabajo en la línea y aprovechándose del dinero de las cuotas. La campaña en sí se limitó a consignas vacías.

El trabajador de la Comisión Electoral dijo: “Las autoridades laborales, que es el Centro Federal Laboral de Conciliación y Arbitraje, le acepta las cosas al sindicato. Hay corrupción también entre las autoridades laborales a pesar de que actúan en contra de los estatutos del sindicato y de la propia ley”.

“Se vende y traiciona de manera similar a EE.UU. con el gabinete de Fain”

Un trabajador activo del área de transmisiones de GM le dijo al WSWS que el voto “de democrático no tiene nada” y sacó algunas conclusiones más amplias:

Alejandra [Morales] ya tenía listo pliego petitorio. [La elección] es una pantalla porque ya Alejandra tenía todo formulado.

Desafortunadamente esta mujer está colocando a allegados para que no haya un choque con su corrupción. Está creando una telaraña de protección a ella misma y sus arbitrariedades sindicales. Los compran con regalías. Es triste cómo la gente se vende y traiciona de manera similar a EE.UU. con el gabinete de [el presidente del sindicato UAW Shawn] Fain. Hacen tantas cosas que no ayudan al trabajador.

Nada sirve mejorar las cosas para cinco de los míos cuando 3.000 siguen careciendo de los beneficios. La política debe ser que todos ganen.

Refiriéndose a las implicaciones para los trabajadores mexicanos de las recientes declaraciones del UAW y Biden sobre la transformación de las plantas automotrices en producción de guerra durante la Segunda Guerra Mundial, añadió:

Las potencias como Estados Unidos debaten las guerras en el mundo, no les interesan cuántos van a morir. Solo les interesa vender su material militar y hacer la guerra. Al trabajador y lo demás por el tubo.

Cuando SINTTIA fue elegido en GM en febrero de 2022, el UAW dijo: “Felicitamos al Gobierno de Biden y a la representante comercial de EE.UU. por garantizar un proceso electoral justo y esperamos una nueva era de sindicatos libres, justos e independientes en México”.

Más tarde ese año, el UAW organizó su primera elección directa para la dirigencia nacional después de una orden judicial. La burocracia sindical no actualizó las direcciones postales ni informó a la mayoría de los trabajadores sobre las elecciones. Como resultado, solo participaron 104.000 de los 1,1 millones de miembros del sindicato. A pesar de estas limitaciones, el trabajador de Mack Trucks Will Lehman recibió casi 5.000 votos con una campaña explícitamente socialista que llamaba a abolir el aparato sindical y construir la Alianza Internacional Obrera de Comités de Base.

Lehman se vio obligado a presentar una demanda contra la decisión del Departamento de Trabajo de aprobar esta elección fraudulenta, que fue ganada por Shawn Fain en una segunda vuelta después de obtener los votos de solo el 6 por ciento de los miembros.

En efecto, la elección fraudulenta del SINTTIA toma una página de sus capacitadores en la AFL-CIO y el UAW, mientras que las autoridades laborales y los tribunales en ambos países actúan con la misma indiferencia a la violación de los derechos de los trabajadores.

La Reforma Laboral en México, que ordenó a todas las empresas legitimar sus contratos con los sindicatos mediante votaciones, fue exigida por los Gobiernos de Estados Unidos y Canadá como condición para el nuevo tratado comercial de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que aumentó aún más la integración regional de las cadenas de producción.

La AFL-CIO en los Estados Unidos, su contraparte Unifor en Canadá e IndustriALL que lideran los sindicatos alemanes, fueron los protagonistas de esta “reforma” durante años antes de su implementación, presionando al Gobierno mexicano y entrenando a sindicalistas supuestamente “independientes”.

Ahora ha quedado claro que las élites gobernantes de Estados Unidos y Canadá no solo estaban preocupadas por desarrollar canales seguros para contener la rebelión contra la CTM.

Reforzar la credibilidad de la burocracia sindical, que preside la principal fuente de mano de obra barata para la plataforma económica de América del Norte, era crucial para (1) intensificar el conflicto económico y militar contra sus rivales, principalmente Rusia y China, y (2) implementar la mayor reestructuración de la industria automotriz en la historia, hacia los vehículos eléctricos y la automatización, que ya ha causado despidos masivos a nivel mundial.

La elección en SINTTIA confirma que a los trabajadores les vendieron una nueva burocracia propatronal para evitar que organizaran organizaciones obreras verdaderamente independientes y democráticas.

Como lo demuestra el gran apoyo recibido por Will Lehman, es posible y necesario que los trabajadores de América del Norte e internacionalmente tomen el poder de las manos de las burocracias y lo devuelvan a las bases obreras, unificando las luchas de los trabajadores a nivel internacional mediante la construcción de comités de base independientes de las burocracias sindicales. Para tener éxito, esto requiere un programa político y una estrategia contra el sistema de ganancias capitalistas y por el socialismo.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 19 de febrero de 2024)

Loading