Más de 10.100 trabajadores de John Deere, en huelga desde hace más de un mes, van a votar el miércoles sobre lo que la empresa llama su 'última, mejor y definitiva' oferta. Desafiando la voluntad de los trabajadores en huelga, el United Auto Workers está obligando a los trabajadores a votar sobre un contrato que es prácticamente idéntico al que rechazaron el 2 de noviembre.
El Comité de Base de los Trabajadores de John Deere ha hecho un llamamiento a los trabajadores para que rechacen el acuerdo de venta, que ignora las demandas de los trabajadores de un salario de $10 por hora para compensar los 25 años de concesiones respaldadas por el UAW, así como los beneficios de salud para los jubilados totalmente pagados para cada generación de trabajadores de Deere. En todo Estados Unidos y, de hecho, en todo el mundo, los trabajadores esperan que los huelguistas de Deere desafíen el chantaje de Deere y del sindicato y sigan adelante y amplíen su lucha.
La huelga ya ha tenido un impacto significativo en Deere, pero el UAW está actuando para arrebatar la derrota de las fauces de la victoria.
Sin embargo, un examen de la situación de la empresa deja claro que no puede aguantar una huelga larga. He aquí tres razones:
1. John Deere se encuentra en una situación de escasez de suministros, que ya le ha costado $1.500 millones.
La llamada de John Deere sobre los resultados del tercer trimestre con los inversores estuvo dominada por la preocupación por las 'limitaciones de suministro'. Joshua Jepsen, director de Relaciones con los Inversores de Deere, dijo a los inversores que la 'última mitad del año' estaría plagada de interrupciones de suministro. Y prosiguió: 'No vemos que eso disminuya a medida que nos acercamos al cuarto trimestre y a 2022. Por lo tanto, creemos que eso continúa'.
Deere se encuentra en una posición complicada. Tiene que suministrar productos para mantener contentos a los inversores de Wall Street, pero en el futuro inmediato es vulnerable a las perturbaciones. Antes de la huelga ya había aumentado los costes en $1.500 millones debido a problemas en la cadena de suministro.
Jepsen continuó: 'Uno de los retos [de la crisis de suministro] es que se trata de una gran variedad de problemas. No se trata de un solo problema, desde el material hasta la mano de obra y la logística en toda la cadena de suministro, lo que hace que sea un poco más difícil y también muy diverso desde una perspectiva geográfica. ... No vemos que esto vaya a amainar a corto plazo'.
El banco de inversión Morgan Stanley preguntó a Jepsen qué estaba haciendo la empresa 'en materia de adquisiciones para asegurarse de tener una cadena de suministro consistente durante el próximo año'. Y añadió: 'Nuestras previsiones no contemplan un cierre, pero ¿qué están haciendo para asegurarse de que no se produzcan cierres significativos?
Los trabajadores de Deere se encuentran en una posición poderosa. La compañía ya está lidiando con una serie de problemas en la cadena de suministro, y la huelga ha exacerbado en gran medida esto. Los agricultores se están preparando para comprar nuevos equipos a medida que aumentan los precios agrícolas, y por lo tanto la demanda es alta, pero Deere está luchando para cumplir con sus pedidos.
Una filial local de la ABC en Davenport, Iowa, lo confirmó desde la perspectiva de los agricultores, escribiendo: 'Los agricultores de la zona estaban preocupados por el acceso a las piezas de los equipos agrícolas después de que el COVID-19 interrumpiera la cadena de suministro. ... Este retraso añadió estrés a los agricultores, y con el estrés añadido de la huelga en el suministro, un agricultor dijo que está preocupado'. El agricultor entrevistado dijo que los agricultores estarán especialmente preocupados si se prolonga hasta 2022, y se agotan sus reservas de equipos.
Los analistas financieros han estimado que Deere ha estado perdiendo decenas de millones en ingresos y beneficios perdidos cada día de la huelga. Además, la empresa llevaba meses luchando por contratar y retener a los trabajadores antes del paro, ya que los salarios y las condiciones de trabajo han bajado tanto que se buscan empleos en otros lugares.
Así pues, los trabajadores se encuentran en un momento especialmente ventajoso para obtener importantes beneficios de Deere.
2. Los planes de John Deere para la 'innovación en la agricultura de precisión' le hacen depender de su mano de obra cualificada.
John Deere tiene ambiciosos planes para ampliar sus unidades de automatización y 'agricultura de precisión'. En los últimos años, Deere ha gastado cientos de millones en la compra de Bear Flag Robotics, una empresa de tractores autónomos, y Blue River Technologies, una empresa de aprendizaje automático. En particular, la empresa está tratando de vender a los inversores su 'Estrategia Industrial Inteligente de Deere', un nuevo modelo de funcionamiento de la empresa que depende de la 'rápida introducción de nuevas tecnologías'.
¿Cómo va a conseguir Deere esta 'rápida introducción de nuevas tecnologías' sino a través de su plantilla? ¿Va a bajar el director general John May a dirigir la línea de producción? ¿Forma eso parte de su contrato de 15 millones de dólares al año?
La unidad de agricultura de precisión de Deere, cosas como See and Spray y ExactApply, son fundamentales para su modelo de negocio. En particular, quiere 'responder más rápidamente a las condiciones cambiantes del mercado'. Es decir, quiere ser capaz de aumentar la producción de nuevas tecnologías rápidamente cuando haya demanda, como en la situación actual.
La empresa necesita desesperadamente mano de obra, pero al mismo tiempo es una corporación global con vastas operaciones y ha amenazado con utilizar su mano de obra a nivel internacional para socavar la huelga. Para combatir a un gigante transnacional como éste, los trabajadores de Estados Unidos deben apelar directamente a sus hermanos y hermanas de las plantas de Deere en otros países para que los apoyen. Estos llamamientos no serán desatendidos, como han demostrado las declaraciones de solidaridad de los trabajadores de Deere en Alemania y Francia.
3. La huelga en Deere tiene y seguirá teniendo un efecto dominó.
A nivel nacional e internacional, se están produciendo docenas de huelgas y protestas entre los trabajadores del transporte, los profesores, los trabajadores del sector público y los trabajadores de servicios. Al igual que la lucha en Deere, otros trabajadores están luchando contra los estragos de la inflación, los agotadores horarios de trabajo y las mentiras de las empresas y los sindicatos acerca de que 'no se deja nada sobre la mesa', incluso cuando las grandes empresas obtienen beneficios récord y pagan a los altos ejecutivos y a los accionistas enormes recompensas.
El rechazo del acuerdo de venta por parte de los trabajadores de Deere animará a otros trabajadores a levantarse y luchar. Como advirtió un académico de la Escuela de Relaciones Industriales y Laborales de Cornell, 'lo que ocurrirá es que habrá más trabajadores que se declaren en huelga', dijo Kate Bronfenbrenner a Yahoo Finance. 'Cada vez hay un efecto dominó con cada una de ellas, si la huelga de John Deere no se resuelve, vas a ver a otro gran grupo salir. Las huelgas son contagiosas. [Énfasis añadido]'
La entrada de más trabajadores en la lucha contra las corporaciones y sus títeres comprados y pagados en el UAW y otros sindicatos proempresariales proporcionará a los trabajadores de Deere los refuerzos necesarios para derrotar a la empresa.
La negativa de la dirección de la empresa a satisfacer las demandas de los trabajadores hasta ahora no es sólo o principalmente un producto de la codicia o la terquedad individual. Wall Street y el establishment político-empresarial están ejerciendo una importante presión sobre la empresa para que 'mantenga' su propia línea.
Los ejecutivos de la empresa han intentado repetidamente recalcar a Wall Street que aplicará 'disciplina' en sus operaciones en el futuro. En su anuncio de junio de su estrategia 'Smart Industrial', Deere escribió: 'Deere adoptará un enfoque más disciplinado para la asignación de capital, dedicando dólares de investigación e inversión a las oportunidades más prometedoras y rentables'.
'Disciplina', en la jerga de Wall Street, significa ser lo más barato y tacaño posible, en particular, en relación con lo que se gasta en trabajadores. Cuando Deere dice que asignará los dólares de inversión a las 'oportunidades más rentables', lo que Deere quiere decir es que está haciendo todo lo posible para evitar gastar dinero, excepto en aquellas cosas que les hacen ganar mucho dinero.
La presión de la élite financiera tiene como objetivo tanto continuar con el flujo masivo de riqueza bombeada de los trabajadores a los grandes inversores de Deere, como evitar que un avance significativo de los trabajadores de Deere desencadene una ola de huelgas contra los bajos salarios y las malas condiciones de trabajo.
Esto significa que mientras los ejecutivos de la empresa están llenos de dinero, la empresa no va a ceder fácilmente en su contrato laboral. La empresa necesita que le pongan los pies en el fuego. Se necesita una lucha prolongada, implacable y unida para obligar a la empresa a acceder a las demandas de los trabajadores.
Los trabajadores de Deere se encuentran en una coyuntura especialmente favorable, con una serie de factores que pueden jugar a su favor. Pero también se enfrentan a importantes obstáculos y riesgos en el camino hacia la victoria, enfrentándose en Deere a un adversario poderoso y experimentado, con el UAW trabajando en su favor.
Para conseguir logros reales, Deere y otros trabajadores que quieran luchar deben tomar la dirección de sus luchas en sus propias manos y ampliar el Comité de Base de Solidaridad de la Huelga de Deere, que se ha creado para unificar a los trabajadores de Deere con los educadores, las enfermeras, los trabajadores de Amazon, los trabajadores de la industria automovilística y de las piezas de recambio, y otros trabajadores de Estados Unidos e internacionales.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 15 de noviembre de 2021)
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